Con el rezo del Ángelus comenzó los festejos en honor al Santo Patrono de CDE, San Blas. Ninguna autoridad estuvo presente. Desde que asumió el cargo el intendente, Miguel Prieto Vallejos, le dio las espaldas a los para recordar al patrono de la ciudad. Pese a todo en forma honesta, y sin uso de dinero público se esta realizando los actos que incluyen la serenata en la explanada de la Iglesia Catedral. Después de haber terminado el rezo apareció Prieto y sus concejales rastreros, y adivinen para que: para una foto.
El intendente Prieto ya hace algunos años no aparece en los actos en honor a San Blas. Pero sin duda llamo la atención la ausencia del gobernador de Alto Paraná, el cartista, Cesar Landy Torres.
Pese a todo sin duda el rezo del Angelus y el primer día del novenario a San Blas tiene su brillo que dan los ciudadanos católicos.
El oficio fue celebrado por el Monseñor, Guillermo Steckling, y dio el siguiente mensaje:
Queridos Hermanos y Hermanas, Queridos P. Ernesto, cura párroco de la catedral, sacerdotes y diáconos presentes, Hermanas Religiosas, laicos activos en el mundo y en la Iglesia, representantes de otras denominaciones cristianas y de otras religiones.
Estimados y queridos pioneros de la ciudad, autoridades civiles, militares, policiales y todos los representantes de la sociedad civil, presidentes y miembros de las comisiones pro-festejo.
En Ciudad del Este, la fiesta de San Blas comienza con el saludo a la Virgen María. Este año ella toma nuestras dos manos, las junta y nos enseña a elevar el corazón a Dios porque en el Paraguay y en sintonía con toda la Iglesia estamos comenzando el año de la oración: Señor, enséñanos a orar. ¡Cuánta necesidad hay de alabanzas y plegarias, contemplación solitaria y rezo en común!
Este año la fiesta de San Blas va a ser especial porque el día mismo del 03 de febrero, a las 10.00 hs, vamos a recibir a nuestro nuevo obispo. Mons. Pedro Collar Noguera, es hijo de la diócesis y conoce su historia; ya tenía 5 años de edad cuando fue fundada nuestra sede episcopal de Ciudad del Este, 56 años atrás. Estarán presentes en la ocasión los obispos del Paraguay y con ellos el Nuncio Apostólico.
Con eso, yo me despediré de esta querida diócesis para acompañarles siempre orando, desde Asunción, mi nuevo domicilio.
El Ángelus es una oración tradicional que comienza con las palabras: “El ángel del Señor”, en latín angelus domini. En el evangelio de San Lucas leemos que el ángel Gabriel entró en la casa de la Virgen “y la saludó, diciendo: «¡Alégrate!, llena de gracia, el Señor está contigo».” Así el ángel da a María un nuevo nombre que es un título muy querido en nuestro país: Llena de gracia.
Blas de Sebaste, nuestro patrono, vivió tres siglos más tarde bajo el Imperio Romano. Eran tiempos difíciles para los cristianos que fueron perseguidos a muerte, y él también derramó su sangre por Cristo. Hoy vemos de nuevo cómo negros nubarrones surgen en el horizonte: guerra, desunión, pobreza extrema, el poder del crimen organizado. San Blas es nuestro intercesor siendo mártir.
Sin embargo, más es conocido y querido por su atención a los enfermos y necesitados. Hoy alabemos también al Señor por las cosas buenas que nos vienen del Dador de todos los bienes. Los santos supieron servir al Señor y a sus semejantes, tanto en circunstancias difíciles como en momentos que anticipaban el cielo. El salmo 36 nos anima a entregarnos en tiempos como hoy al poder de Dios cuando dice: Encomienda tu camino al Señor, confía en él y él actuará”.