Los recaudadores de la denominada tasa por el contrabando, que es una coima, rinden en la comandancia del Área Naval del Este, a cargo del capitán de navío Marcos Adrián Rivas Rojas. El responsable de cobrar a los furgones y camiones es Alexis Gavilán, quien tiene una oficina de recaudación en el estacionamiento de Puertos. Luego está el funcionario militar, Lazaro Cristaldo Ovelar, quien se encarga de recibir la plata de los moto-contrabandistas, y está apostado en la entrada al predio de la ANNP en la zona primaria del Puente de la Amistad.
El esquema funciona desde hace años, y pese a los cambios en la cúpula de la Marina en Ciudad del Este, todo el sistema se mantiene intacto.
Con base en los datos arrimados a AHORA CDE, los dos principales recaudadores, los que cobran la coima, que es una especie de tasa al contrabando, rinden cuenta directamente en la comandancia del Área Naval, donde el comandante es el capitán de navío Marcos Adrián Rivas Rojas, quien hace poco asumió el cargo.
Todos los días ingresan toneladas de productos de contrabando por el Puente de la Amistad desde Brasil y Argentina, y esto ocurre debido a que los paseros, quienes son personas que transportan y meten las cargas en forma ilegal al país, tienen la protección de los militares, pero para tener esto deben abonar la tasa que los marinos imponen.
El principal recaudador es Alexis Gavilán, a quien inclusive le montaron una oficinita con aire acondicionado en la zona del estacionamiento del predio de Puertos. En el lugar cobra las coimas, y así evita ser fotografiado.
El citado recaudador está dentro de las cuatro paredes por más de 12 horas recibiendo la plata de quienes meten el contrabando en furgones y camiones, de acuerdo a las denuncias que hemos recibido.
El otro recaudador ya es un efectivo militar activo de la Marina, Lazaro Cristaldo Ovelar, y él es el encargado de recibir las coimas de quienes meten sus productos en motos.
Este militar está apostado en el portón de acceso a Puerto en la zona primaria del Puente de la Amistad; su “oficina” es debajo de un árbol, desde donde puede controlar el flujo de moto-contrabandistas. Existen al menos 200 motos que todos los días pasan el Puente de la Amistad hacia el Brasil y vuelven con algún tipo de mercadería.