En la zona del ex atracadero de la Itaipú, se formó un inmenso vertedero que contamina el río Paraná y el aire de la frontera, ya que se registran permanentes quemadas. Es un vergonzoso adorno en la «cara» de Ciudad del Este en la zona de las Tres Fronteras. Es el triste ejemplo de la situación de abandono en la que se encuentra la segunda ciudad más importante del país por la desidia e incompetencia de la administración municipal de Miguel Prieto Vallejos.
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En el vídeo se puede ver la magnitud del problema ambiental que hay a orillas del río Paraná. Pero la parte ambiental no es el único problema.
En la cara de Ciudad del Este hay un enorme vertedero. Centenas de turistas pasan todos los días por allí en los kattamaranes, y lo primero que ven es basura. Sí, inmensa basura.
Es el triste ejemplo de cómo está totalmente abandonada Ciudad del Este. Y es culpa del incompetente intendente Prieto, quien se destaca solo por las denuncias de corrupción y por sus campañas mentirosas al estilo nazista. Trata de hacer creer al pueblo que está haciendo algo, cuando en realidad no hace nada.
Al problema, gravísimo, ambiental que hay se suma lo turístico, que es una vergüenza, pero no termina allí. Hay otro grave problema. Lo social. Cada vez más gente humilde y otros, que no tanto, pero sí sinvergüenzas, están ocupando la franja de seguridad en forma ilegal y nadie interviene.
Hay una miserable explotación de personas vulnerables por parte de empresas recicladoras de residuos y esto ocurre con la venia de la administración municipal de Prieto. Es cierto que el problema ya se arrastra hace años por la incompetencia y el alto nivel de corrupción en la administración municipal.
Pero Prieto está en el cargo desde 2019, y en cinco años tampoco hizo nada.
En las fotos y en el video, se pueden ver los rastros en las paredes de concreto del atracadero de las quemas. Se ve el negro de la vergüenza.
Ciudad del Este no es destaque por sus atractivos en la prensa de las Tres Fronteras, pero en las últimas semanas es destaque por este vertedero, que repetimos es el triste ejemplo de la desidia de la gestión del intendente Prieto.
