El 8 de marzo se ha convertido en un símbolo de una lucha que lleva más de un siglo. El Día Internacional de la Mujer recuerda el sacrificio de miles de trabajadoras que, a lo largo de la historia, exigieron derechos básicos en contextos de extrema desigualdad. Desde las movilizaciones obreras hasta los avances en igualdad de género impulsados en el siglo XXI, la conmemoración ha evolucionado para abarcar la diversidad de reclamos de las mujeres en todo el mundo.
Cuáles fueron los hechos que dieron lugar a la celebración del Día Internacional de la Mujer.
Las primeras manifestaciones de mujeres trabajadoras ocurrieron en el siglo XIX, en un contexto de industrialización y explotación laboral. Un episodio clave tuvo lugar en Nueva York en 1875, cuando cientos de obreras textiles salieron a las calles para denunciar los bajos salarios y la brecha salarial con los hombres, quienes ganaban más del doble por el mismo trabajo. La represión fue brutal y 120 mujeres murieron como consecuencia de la brutalidad policial.
Años después, dos tragedias marcaron la lucha por los derechos laborales femeninos. En 1908, un incendio en la fábrica Cotton de Nueva York acabó con la vida de al menos 130 trabajadoras que permanecían en huelga dentro del edificio. El siniestro no fue un accidente: ofuscado por el reclamo de las obreras, el patrón mandó a cerrar las puertas de la planta como intento de hacerlas desistir de la medida de fuerza.
Según la ONU: “El empoderamiento de la próxima generación es el núcleo de esta idea, ya que la juventud, en especial las mujeres jóvenes y las niñas adolescentes, serán las protagonistas de cambios duraderos en el futuro”.
El 8 de marzo no es una celebración, sino un recordatorio de la deuda histórica con las mujeres. Desde la lucha por mejores condiciones laborales hasta la exigencia de políticas contra la violencia de género, la conmemoración sigue siendo un llamado a la acción. (✍Fuente: INFOBAE)