Caña, ruda y limón, un mítico brebaje que cada 1 de agosto se consume para purificar la sangre y atraer la buena suerte, costumbre trasmitida por los guaraníes y se extendió de generación en generación hasta la actualidad. El tradicional preparado fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial (PCI) por la Secretaría Nacional de Cultura (SNC) del Paraguay.
Según el informe técnico elaborado por la Dirección de Estudios, Antropología, Arqueología y Paleontología de la SNC para recomendar la aprobación de la declaración de PCI a los conocimientos y saberes tradicionales del carrulim; los paraguayos cumplimos con un ritual muy antiguo, que consiste en tomar unos sorbos del mítico y efectivo brebaje.
“Este tradicional preparado es el único que puede librarnos de todo lo malo según la creencia popular, la memoria, la espiritualidad, la medicina tradicional, los rituales, los ritos de purificación, influyen muy considerablemente en los valores y creencias que constituyen el fundamento de muchos usos sociales y tradiciones culturales en nuestro país”, afirma el informe técnico.