El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, mando echar de la comuna a los funcionarios quienes denunciaron el esquema de venta de columbarios en el cementerio municipal. En contra partida premio a los acusados que son Marina Portillo (hermana de la concejal rastrera liberal, María Portillo) y su esposo César Caballero. El jefe comunal había anunciado que el caso sería denunciado en la fiscalía, pero no hizo nada. Vidal Vázquez, fue el que delato a quienes denunciaron la venta ilegal de espacios en el campo santo.
El intendente Prieto recibió la denuncia de que columbario estaban siendo cerrados y se le ponía nombres. Pero estaban vacíos. Esto lo hacían para comercializar el espacio después. Lo vendían hasta por 15 millones de guaraníes a familias desesperadas por encontrar un lugar donde dar digna sepultura a su ser querido a quien perdieron. Así se miserable actúan los funcionarios leales de Prieto.
El jefe comunal mando a Vidal Vázquez para que aclare el caso. Este fue y los funcionarios confiaron en Vázquez y le contaron como era l esquema de venta ilegal de columbarios y por sobre todos quienes manejaban el negocio.
Se traba de Marina Portillo y su esposo César Caballero. Hermana y cuñado de la concejal rastrera liberal, María Portillo.
Vázquez fue a informar a Prieto y delato a los funcionarios quienes hicieron la denuncia ante la concejal Portillo.
El intendente al confirmar el negocio con los columbarios había anunciado que todo sería denunciado ante el Ministerio Público. Fue una mentira más. Nunca lo hizo.
Lo que hizo Prieto fue mandar echar a todos los funcionarios quienes denunciaron el esquema de venta de los columbarios y premio a los acusados que quienes son Marina Portillo y su esposo César Caballero. La concejal rastrero Portillo exigió a Prieto a que todos quienes denunciaron a su hermana y su cuñado sean rajados.
Así actúa el intendente Miguel Prieto Vallejos, y sus concejales rastreros, como un grupo mafioso. Quien se atreve a denunciarlos son perseguidos, amenazados, y castigados.
