Los concejales rastreros del intendente de CDE, Miguel Prieto, son los nuevos magos de las finanzas. A solo 5 meses de haber asumido el cargo se están convirtiendo en potentados empresarios y realizan millonarias intervenciones. Y eso que Prieto dijo que los mismos deberán vivir de sus dietas que es de G. 20 millones por mes.
La concejal rastrera y chatarrera, Alisón Anisimoff, inauguró una coqueta cancha de padel “Más Padel”, donde si duda hubo una considerable inversión.
Mientras la misma quería que una importa calle sea declarada sentido único para que ella no tenga problema para ir a la escuela de su hijo, su millonaria inversión se concretaba. Y eso que estamos en plena pandemia donde hay serios problemas de liquidez. O sea, falta circulante de dinero. No hay plata.
Pero antes de la cuestionada edil, otro integrante del Clan Prieto ya mostro su buen pasar económico. Se trata del ex intendente, Hugo Benítez, quien es el “secre” de Prieto. Este inauguró su “Piraña Joe” (que es una conocida marca mexicana) que es un quincho a todo lujo para fiestas privé.
El ex jefe comunal es ahora asesor planillero vip con un sueldo de G. 8 millones.
Pero Hugo y Alisón no son los únicos integrantes del Clan Prieto quienes están mostrando un repentino bienestar económico y financiero.
Mientras las denuncias de negociados, déficit financiero en la comuna crece, los ediles rastreros siguen aprobando todo, y aumentando sus “inversiones”.
En el caso de la concejal Anismoff, es bien sabido que la empresa de transporte de la misma fue sacado de circulación debido al pésimo servicio que prestaba. Hacia años que esta familia de chatarreros sometía a la población ofreciendo un servicio paupérrimo en el transporte público.
Alison es hija de Alejandro Anismoff quien ya fue concejal. Estuvo prófugo de la Justicia luego de haber sido procesado por meter la mano en el bolsillo de los contribuyentes. Se fugó como rata al Brasil a través de la usina Itaipú.