La cotización del dólar frente al real está bajando. Y ¿por qué entonces los brasileños no están viniendo a realizar compras al comercio de Ciudad del Este? Aquí te contamos. Las medidas adoptadas por el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula Da Silva para frenar la inflación están desalentando el consumo. Los brasileños no están comprando. También aumentó los impuestos sobre los productos importados.
El miércoles 18, la FED de EE. UU. (Banco Central) anunciaba corte en la tasa de interés en un 0,50%. Esto hizo que el dólar baje más aún en relación al real brasileño. Pero paralelamente el Banco Central del Brasil decidió aumentar la tasa de interés, que subió en 10,75%.
O sea, esto es una de cal y otra de arena para el comercio de Ciudad del Este. Mientras el dólar baja en relación al real, con el aumento de la tasa de interés se desalienta el consumo.
El Brasil tiene la segunda tasa de interés más alta del mundo, quedándose atrás solamente de Rusia.
Las medidas adoptadas por el Gobierno brasileño aumentando la tasa de interés hacen frenar la inflación, pero desalientan el consumo. El dinero está más caro. Nadie quiere usar sus tarjetas de crédito, porque están más caras; tampoco están realizando préstamos. Al existir un menor consumo, los precios bajan y la inflación baja.
Esto es lo que está desalentando la venida de brasileños a realizar compras en Ciudad del Este. El consumo está siendo restringido por el Gobierno que quiere controlar y bajar la inflación.
Esta situación no es de ahora. Ya hace un buen tiempo los brasileños dejaron de venir, y los pocos que vienen compran en forma muy limitada.
Pero existen otras medidas. Una de ellas es el aumento del impuesto a los productos importados, y un control más riguroso por parte de los organismos de seguridad y fiscalización.
Todo esto está dejando vacío el comercio de Ciudad del Este.