El ingeniero químico libanes, Hmayed Fadel Abbas, quien ingreso al Paraguay como “refugiado” se pasea entre Ciudad del Este y San Paulo, Brasil. El mismo va permanentemente a la fábrica que Walid Sweid está montando en la capital paulista. Se habla que la producción de cigarrillos saborizados, es parte de un esquema de lavado de dinero. Hay muchas interrogantes en relación a este químico y su relación con Sweid.
Las informaciones a los que tuvimos acceso revelan que Walid Sweid está montando una fábrica para producir cigarrillos saborizados, que actualmente son traídos de India.
Supuestamente Sweid trajo al ingeniero químico, Hmayed Fadel Abbas, para trabajar en la producción de cigarrillos saborizados.
Pero el mismo lo metió como refugiado, sin que existe motivos, y dijo que trabajaría en su fábrica de Flavors of Americas. Pero no es así.
El mismo está trabajando en San Paulo en la fábrica que se está montando.
Nuestra fuente igualmente nos señaló que la fábrica de cigarrillos con sabor que está montando en Brasil, Walid, es parte de un esquema de lavado de dinero. Es bien sabido que el Brasil los impuestos a estos productos son muy elevados.
Fadel Abbas, suele venir por Ciudad del Este. Hasta el momento no se informó cual es la situación legal del mismo en el país.
Es bien sabido que Walid Sweid, quien está vinculado al vicepresidente, Hugo Velázquez y al ex presidente Horacio Cartes, tiene denuncias por esquema de lavado de dinero.
La influencia que el mismo tiene quedo demostrado al meter a Hmayed Fadel como refugiado en forma ilegal.
En octubre de 2019, el mencionado químico libanes, Hmayed Fadel Abbas, recibió la constancia de solicitud de refugiado 712/2019, de la Comisión Nacional para Apátridas y Refugiados (CONARE).
El mencionado documento está firmado por el ministro Juan Ignacio Livieres, y esta un P/A, que es por autorización. Actualmente el presidente del CONARE es el ministro Carlos Gamarra.
No existen ningún motivo para que el mismo el mismo pida refugio en nuestro país, de acuerdo a los datos que nos hicieron llegar. Es más, hay ciudadanos libaneses quienes hace más de tres años están esperando una visa para venir a Paraguay y no lo consiguen.