Un grupo de comerciantes e importadores de Ciudad del Este quiere que el porcentaje del impuesto sobre los cigarrillos electrónicos baje de los actuales 52% a solo 10%. Esto para poder aumentar el contrabando de los vapers hacia el Brasil, donde está prohibida su comercialización o uso. Estos productos vienen desde China, sin control sanitario, y lo meten de contrabando, actualmente, por la elevada presión impositiva que tiene.
El pedido para bajar el porcentaje del tributo sobre los vaper fue enviado a la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT). Uno de los que «importa» estos productos es el diputado colorado-cartista, Yamil Esgaib, según los documentos.
Pese a que ingresan por semana más de 200 mil cigarrillos electrónicos, esto no se ve en las declaraciones aduaneras. Eso es por qué estos productos entran de contrabando. Cambian la partida arancelaria para no pagar los 52% de impuesto que en forma legal lo deben hacer.
Ahora piden que el tributo se baje en 42%. O sea, pase de los actuales 52% a solo 10%. Dicen que esto les permitirá ser más competitivos. Pero es una mentira. Los cigarrillos electrónicos van a ser enviados de contrabando al Brasil, donde está prohibida su comercialización y uso.
En Ciudad del Este hay centenas de firmas comerciales que solamente venden vaper. Es un negocio millonario que no se ve en los documentos tributarios debido a que hay un enorme esquema de contrabando, que pese a todas las denuncias sigue intacto.
Con el tributo de 10%, supuestamente van a aumentar el pago de tributos, pero a quienes van a vender legalmente. A los brasileños no le van a poder vender legalmente porque está prohibido allá.
Lo que quieren hacer es que se abra otro negocio del humo como los cigarrillos normales. Sin duda, esto es muy preocupante.