Usando dinero del impuesto de los ciudadanos esteños, el intendente, Miguel Prieto, ofreció una cena a sus amigos ricachones, entre ellos comerciantes acusados de evasión y piratería. Les ofreció una mesa con lo mejor de la gastronomía internacional y bebidas muy caras y de lo mejor. Un día después le entregó panchos y gaseosas, baratitos, de pésima calidad a los niños por día. A esto debemos mencionar que da un miserable pancito con leche de soja como merienda a los escolares. Vean en las fotos de la propia comuna la tremenda diferencia y saquen sus conclusiones.
Las palabras sobran cuando hacemos un paralelismo entre lo que ofreció Prieto a los niños por su día, y lo que hubo en la mesa de la cena que el jefe comunal pagó con dinero municipal para sus amigos ricachones.
Los ciudadanos pueden observar las fotos y sacar sus conclusiones.
Es así que el intendente Prieto usa y abusa con el dinero del impuesto que los ciudadanos pagan. Para la cena de la «Vergüenza Empresarial» se gastaron, supuestamente, 282 millones de guaraníes. Esto dice las notas, no los comprobantes. Porque se menciona que la cena no tuvo costo para Prieto, es por dar impunidad a quienes violan las leyes de la República.
Es de miserable estar dando panchos a los niños, y a los ricachones carne de primera calidad, al igual que aves y pescado. A los niños gaseosa barata, y a los ricachones vinos de lo mejor y carísimos.
Vean las fotos y saquen sus conclusiones.