Un grupo de agentes de la Policía Nacional estuvo protegiendo al procesado, que tiene dos imputaciones, el intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, cuando estaba siendo escrachado por el ex concejal, Celso Miranda, más conocido como “Kelembú”. Además, estuvieron los matones de Prieto, quienes son pagados con dinero de los ciudadanos. En lugar de protegerlo, debieron detenerlo. La Policía debe estar al servicio de los ciudadanos y proteger sus bienes de quienes los roban.
Prieto fue hasta el Hospital Regional, donde está el Pabellón de Contingencia y donde estuvo el fiscal, Silvio Cobeta. Prieto fue junto a su asesor planillero, Dani Mujica, la concejal rastrera y chatarrera, Alison Anisimoff, y sus matones, quienes reciben sueldo de la comuna, o sea, son pagados con la plata del impuesto que pagan los ciudadanos.
SONRISA DE UN POLÍTICO CORRUPTO PROTEGIDO E IMPUNE:

El hombre con anteojos es uno de los matones de Prieto que la ciudadanía debe pagar con su dinero.
También fue el ex concejal Kelembú, para escrachar a Prieto, pero la Policía impidió que el mismo llegue cerca del corrupto jefe comunal.
Solamente en nuestro país la Policía protege a un corrupto; en otros países lo llevan preso, como deberían hacerlo aquí también. Pero…