Una denuncia por violencia familiar en el Paraná Country Club de Hernandarias reveló un esquema de tráfico de drogas y lavado de dinero desde el mencionado barrio cerrado exclusivo. El caso involucra a Paulo Ricardo Franco, quien fue denunciado por su esposa Laura Barboza de Souza, por agresión. Ambos son brasileños. Paulo Ricardo maneja el esquema de tráfico del narco prófugo, Lindomar Reges Furtado, y la casa de cambios UNO Cambios S.A. (ex UNIEXPRESS), usado para el lavado de dinero del tráfico, según fuentes policiales. Lindomar Furtado se escapó del Paraná Country, en las narices de la SENAD, quienes no pudieron ingresar rápido al lugar.
La casa de cambio, UNO Cambios S.A., donde Lindomar Furtado, narco prófugo, y su lugarteniente, Paulo Ricardo Franco, preso, son supuestamente socios, se denominaba Uniexpress, donde aparecía como principal socio José Luis Velázquez Popov, quien ya fue señalado de lavar dinero de actividades ilegales.
Sobre el caso van saltando más información del brasileño que fue detenido por violencia familiar; este con su esposa se dedicaban al tráfico y explotaba casa de cambios en el Paraná Country Club. Esto es lo que se publica en las redes sociales.
La esposa del brasileño detenido también ya fue detenida por la policía brasileña en su momento, específicamente en Curitiba el 11 de agosto 2021.
La mujer Laura Barboza de Souza estaba en un vehículo VECTRA bordo chapa ARX 4G07 y tenía en su rodado doble fondo la suma de 545 mil reales.
Paulo Ricardo Franco (37), también con antecedentes en su país por narcotráfico y robo agravado, está imputado por violencia familiar con pedido de prisión. El mismo fue detenido el fin de semana luego de haber sido denunciado por su pareja.
Al momento de la intervención en su residencia, la policía encontró un verdadero arsenal. En base a los datos, el extranjero sigue activando fuertemente el narcotráfico en nuestro país; incluso sería dueño de una casa de cambios que opera dentro del lujoso barrio cerrado donde estaría lavando el dinero proveniente del narcotráfico.
Sería el principal aliado del también narco brasileño con orden de captura internacional Lindomar Reges Furtado.
La captura del narcotraficante brasileño, quien operaba tranquilamente desde el exclusivo Paraná Country Club, se produjo después de que Laura Barboza de Souza saliera a pedir auxilio por las calles del barrio cerrado.
Paulo Ricardo Franco, el narco en cuestión, logró escapar durante unos kilómetros, pero en su huida chocó contra una columna de la ANDE.
Posteriormente, Franco regresó al barrio cerrado, completamente descontrolado. Los intervinientes presumen que estaba bajo los efectos de alguna droga en ese momento. Fue entonces cuando lo capturaron y lo pusieron a disposición de la fiscal Natalia Montanía, quien lo imputó por violencia intrafamiliar y violación a la ley de armas, solicitando al juzgado que convierta en prisión la detención del extranjero».
La pareja del brasileño detenido relató a las autoridades que desde hace algunos meses venía siendo víctima de constantes agresiones físicas por parte de Paulo Ricardo Franco, hasta que finalmente, durante el fin de semana, se animó a salir de su casa y pedir auxilio a los guardias del condominio.
El ahora detenido es accionista de una casa de cambios que opera dentro del Paraná Country Club, la cual utiliza como base de operaciones. Según datos de inteligencia, Franco sigue involucrado activamente en el tráfico de drogas, y se presume que la entidad financiera es utilizada directamente para el lavado de activos.
Además, trascendió que, tras la fuga del narcotraficante Lindomar Reges Furtado, ocurrida también en el Paraná Country Club, Paulo Ricardo Franco quedó como su principal socio en la zona, manejando todos los «negocios» del buscado internacionalmente.