El largo feriado en el Brasil y la Argentina, hizo que miles de turistas vengan a la zona de las Tres Fronteras. Muchos de ellos decidieron cruzan al lado paraguayo para realizar compras general filas y caos en el transito en la zona del Puente de la Amistad y en la zona comercial de Ciudad del Este. La cotización del real en baja en relación al dólar ayudo. Lamentablemente estas afluencias masivas de visitantes siguen sin se aprovechado por nuestro país, y como siempre hay una completa ausencia de la Secretaria Nacional de Turismo (Senatur).
El largo feriado de Corpus Christi, en el Brasil, atrajo el viernes (20) a miles de turistas a la frontera con Paraguay. Desde las primeras horas del día, una enorme cola, (doble y triple fila) se apoderó de la BR-277, hasta el Puente de la Amistad, en dirección a Ciudad del Este, llegando hasta la zona del Puerto Seco de Foz – un atasco de casi tres kilómetros.
Las imágenes divulgadas por la Receita Federal (Secretaría de Ingresos Federales) muestran la dimensión del caos: largas colas (de dos y tres filas) de camiones, autobuses y vehículos de pasajeros ocupan los carriles, con el tráfico prácticamente paralizado. El intenso tráfico es un reflejo de la combinación del feriado en Brasil y el feriado argentino – Día de la Bandera – también celebrado este viernes, lo que ha aumentado el flujo de turistas en la triple frontera.
El sector turístico celebra una ocupación hotelera, en Foz de Yguazú, media en torno al 76%, lo que impulsa la economía de la región. Otro factor que estimuló los viajes masivos a Paraguay fue el tipo de cambio del dólar, que alcanzó los 5,64 reales, uno de los niveles más bajos del año, lo que hizo aún más atractivas las compras en Ciudad del Este.
Aunque las tiendas de Paraguay abrieron normalmente el jueves 19, fue el viernes cuando la mayoría de los compradores decidieron cruzar el Puente Internacional de la Amistad. Desde primera hora de la mañana, peatones, turismos, autobuses turísticos y camiones se agolpaban en el puente, enfrentándose a horas de espera en la cola que se extendía hasta el Puerto Seco, sobre la BR 277, en el lado brasileño, haciendo que el tráfico fuera lento y caótico.
Después del medio día el problema de invirtió. Se formaron filas en las calles y avenidas de la zona céntrica de Ciudad del Este, empeorando el caos en el transito de toda la zona comercial y adyacencias.