Desde hace años, el ex muelle de la Itaipú es un enorme vertedero. Allí es el inicio de la ruta 07 Py, y es un basural. En medio de los desechos hay niños que juegan. Es enorme el depósito de residuos que hay allí y que es observado por centenas de turistas que todos los días se pasean en los Kattamaranes (embarcaciones para turismo) por las aguas del río Paraná que igualmente es contaminado. Es una zona de responsabilidad de la municipalidad de Ciudad del Este, que ignora el grave problema ambiental y social que hay allí.
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Son personas de escasos recursos quienes construyeron sus precarias viviendas sobre la ruta 07 Py. Casi toda la ruta en donde se inicia la misma está tomada por construcciones precarias y basura.
Aun hay vehículos que se aventuran y cruzan por lo que podría ser considerado una favela (villa miseria).
En medio de este inmenso basural hay familias enteras quienes viven de la basura. Son recicladores, pero llevan todo tipo de desechos. Los niños juegan en medio de toda esa inmundicia. De esto saben todas las autoridades en todos los niveles, pero todos lo ignoran.
Una parte de la basura que se lleva hasta el lugar es aprovechada o sea es reciclada. Hay personas y empresas que van a comprarles. Lo que no se aprovecha es arrojado al lecho del río Paraná, que registra un alto nivel de contaminación en dicho sector. Por allí pasan turistas que observan espantados la gran cantidad de basura.
La basura que llega allí va desde diferentes puntos. De Ciudad del Este, Presidente Franco, Minga Guazú, Hernandarias, por mencionar algunas. Los recolectores salen a buscar en motocarritos los residuos para llevarlos allí, y después aprovecharlos y el resto tirar al río Paraná.
Todos los días van camiones de gran porte a sacar de allí lo que se puede reciclar. La mayor parte de la ganancia va a los intermediarios y los reciclados se quedan con las migajas. Todas las casas allí tienen energía eléctrica, pero no hay ningún medidor.