El lunes 6 de agosto de 2018, la Universidad Central del Paraguay (UCP), que está siendo investigada por el Consejo Nacional de Educación Superior (CONES) y que tendría vínculos con el narcotráfico, abrió sus puertas oficialmente en Ciudad del Este. Para el evento, los directivos de la casa de estudios movieron todas sus “influencias”, logrando traer a Ruth Benítez Perrier, madre del futuro presidente de la República, Mario Abdo Benítez.
La señora Benítez Perrier, fue la que desato la cinta de inauguración del majestuoso edificio ubicado en la avenida del Lago de la República, del barrio Boquerón, de la capital del Alto Paraná, donde estará la Facultad de Ciencias de la Salud (Medicina) y Ciencias Empresariales. Justamente la carrera de Medicina de la UCP, no está habilitada por el CONES, organismo que ya intimó a los directivos por promocionar una carrera no habilitada, infligiendo de esa forma uno de los requisitos principales y al mismo tiempo estafando al estudiantado, que en su mayoría proviene del Brasil.
Según los datos, la UCP, también estaría salpicada con el dinero proveniente del narcotráfico, ya que sus directivos tendrían estrecha relación con criminales. Uno de los mismos es Edgar Dávalos, director administrativo y Karlos Bernardo, también director administrativo y rector de la sede de la UCP, de Pedro Juan Caballero. A estos se los vio muy cerca de Ruth Benítez Perrier, madre del futuro presidente de la República, Mario Abdo Benítez, el día de la inauguración del edificio de la casa de estudios, desplazando incluso al Rector de la UPC, Luis López Zayas.
Dávalos, según nuestras fuentes, se presenta también como despachante de aduanas y sería familiar de Zulma Ramona Dávalos, esposa del narcotraficante, Tomás Rojas Cañete, condenado a 25 años de cárcel por narcotráfico. El segundo, Karlos Bernardo, maneja, siempre según los datos, fuertes lazos con personas ligadas al narcotráfico en la zona de Pedro Juan Caballero.