Nada detiene, al parecer, a los directivos de la Universidad Central del Paraguay (UCP) en sus planes de fortalecer la carrera de Medicina en el Este del país. A pesar, que la UCP, no está habilitada por el Consejo Nacional de Educación Superior (Cones) y mucho menos acreditada por Agencia Nacional de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (Aneaes), las inversiones y las ofertas de inscripción no cesan, tanto en sus locales de Ciudad del Este y de Minga Guazú.
Desde el año pasado la UCP, está en el ojo de las autoridades educativas superiores, pero hasta el momento no existe ninguna resolución al respecto en cuanto a la situación legal de la casa de estudios, especialmente de parte del Cones.
Mientras se aguarda un resultado de las pesquisas, las instalaciones de la Universidad Central del Paraguay, crecen en infraestructura, siendo sus alumnos en un casi 100 por ciento brasileños, quienes vienen a Ciudad del Este, para cursar, especialmente la carrera de Medicina.
Conforme con los datos, ahora la directiva de la UCP encontró un nuevo aliado comercial en Alto Paraná. Se trata de Alcidio Da Silva, empresario dedicado al rubro de automotores. ¿Les suena Da Silva Automotores? Bueno es el mismo. En el predio del Complejo Internacional del Este (CIDE), de Minga Guazú, perteneciente a Da Silva, se está invirtiendo fuertemente en las instalaciones de la UCP, la cual promociona también, para ese local, la carrera de Medicina. Ahora se está en plena etapa de inscripciones y las clases inician el próximo 6 de febrero, según los datos.
Dos puntos llamativos: en ambos locales, el de Ciudad del Este, situado en la avenida del Lago de la República y en el CIDE, de Minga Guazú, las inversiones económicas no terminan. Y ninguno de ellos está habilitado oficialmente. En síntesis: ilegalidad y estafa a los alumnos.
El Cones y la Aneaes, divulgaron hace días el listado de universidades privadas habilitadas y acreditadas. En ninguna de las listas aparece la Universidad Central del Paraguay.
Las cabezas visibles de la UCP, son según los datos, el Rector de la sede de Asunción, Luis López Zayas; Karlos Bernardo, director administrativo y rector de la sede de Pedro Juan Caballero, como así también, Edgar Dávalos, director administrativo, de la sede de Ciudad del Este.
Los dos últimos son los que manejan las sedes de Ciudad del Este y de Minga Guazú. Conforme con las fuentes, dinero proveniente del narcotráfico, especialmente de la zona del Amambay, es utilizado para la “inversión” en la educación. Por eso decíamos en el título de este material que la UCP, se maneja entre la ilegalidad, el narcotráfico y el lavado de dinero.