Tras el rotundo éxito de la Villa Navideña de Itaipu, que reúne a miles de personas todos los días con varios atractivos musicales, juegos, decoración navideña, food park, feria de emprendedores y más, el intendente de Ciudad del Este Miguel Prieto inició una serie y movidas para tratar de levantar su imagen con su actividad navideña, que ha perdido bastante oxígeno en los últimos días.
Entre las medidas tomadas por Prieto, estuvo la de buscar apropiarse de una actividad privada, la “Caravana Coca Cola”, un evento privado de la multinacional que se realiza en varios países, y que en el Paraguay tuvo su actividad centrada en Asunción, Encarnación y Ciudad del Este.
En una movida de redes sociales, la Municipalidad de Ciudad del Este, y en especial el intendente, buscan presentar el evento de la empresa de bebidas como propio, siendo que no tienen nada que ver ni con la concepción, la organización ni el financiamiento, y simplemente buscan apropiarse de la actividad para mostrarlo como un “logro” de su gobierno municipal, acorralado por denuncias de corrupción.
Mientras las calles están destrozadas, hay atrasos de salarios, más de 40 denuncias de actos de corrupción y al menos 2 imputaciones con pedido de juicio oral, Prieto busca congraciarse con la gente con una actividad navideña en la que se hace trabajar a los funcionarios para elaborar decorados reciclados, utilizando elementos que los mismos son obligados a llevar como botellas de plástico, y gastando un promedio de 2 mil millones al año en un feroz negociado que incluso llegó a involucrar a personas humildes que firmaron documentos por estos fondos, sin que se sepa el destino de los mismos.