El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, mando asfaltar la calle que pasa frente y al costado del Colegio Del Sol, donde estudia el hijo de la concejal impresentable y rastrera, Valeria Romero. El centro educativo “chuchi” es propiedad de la hermana de la ex senador, Nani Arrua. Las calles pavimentadas son poco usadas, solamente por los padres de los alumnos del citado colegio y de otras instituciones educativa como Sembrador y Santa Teresita del Niño Jesús.
La calle que pasa frente al colegio “chuchi” ubicado en el barrio Boquerón de Ciudad del Este, tenía pavimento pétreo y estaba en pésimas condiciones, al igual que el que pasa al costado de la institución educativa privada.
Las dos calles casi no registran movimiento de vehículos a no ser en horarios de salida y entrada del Colegio Del Sol. Además, allí está el colegio Sembrador y Santa Teresita del Niño Jesús, ambas tienen sus frentes sobre la avenida del Lago, y las calles asfaltadas dan detrás de sus edificios.
Sin duda llamo la atención que las dos arterias con poco transito hayan sido asfaltados al apuro por parte del imputado intendente, Miguel Prieto Vallejos.
El Colegio Del Sol tiene como una, o la única, propietaria a Marlene Arrua, hermana de la ex senadora, Nani Arrua, quien ya fue jefe de campaña del ahora intendente Prieto.
Después transcendió que el hijo, o los hijos, de la impresentable y rastrera concejal, Valeria Romero, estudian en dicho colegio y que el pavimento asfaltico ella se comprometió a los padres de la institución “chuchi” y Prieto usando el dinero del impuesto de los ciudadanos lo hizo.
La esbelta concejal, ex pareja de Prieto, es presidente de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de la Junta Municipal, pero la misma no sabe cuál es la situación financiera y económica de la comuna, y hasta dijo que la Intendencia Municipal era una entidad prestamista.
Este no es el primer caso de una concejal rastrera que usado su influencia para beneficiar al colegio de su hijo.
Antes lo hizo la concejal rastrera, Alison Anisimoff, quien quiso modificar el sistema de circulación de una calle para que ella tenga facilidades a la hora de llevar a su hijo al colegio “chuchi”. Pero la reacción ciudadana lo evito.
Ahora no pregunten como están las calles frente a las escuelitas de los hijos de los “vairos” o comunes. Vayan y vean.