Funcionarios municipales y hurreros del intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto, se convirtieron en piqueteros para impedir el ingreso de vehículos y personas en la zona céntrica de la ciudad, a excepción de quienes iban a manifestarse a favor de la corrupción y la impunidad. Se ubicaron en puntos estratégicos de acceso al centro.
Prieto hizo de todo tratando de conseguir apoyo para su marcha en favor de la corrupción y la impunidad. El jefe comunal organizó la movilización tratando de presionar al Ministerio Público para evitar nuevas imputaciones y a la Justicia tratando de evitar su prisión domiciliaria.
La organización de esta movilización usando toda la estructura comunal, usando su influencia como intendente, presionando y amenazando a diferentes sectores justifica que el mismo no siga en el cargo. Sea detenido, y no con arresto domiciliario y si a la cárcel.
Los piqueteros de Prieto se colocaron en puntos estratégico de acceso al centro impidiendo el paso de vehículo.
Eran grupo de 20 a 50 personas. Muy poca cobertura policial se pudo ver.