Una zona de humedal y cauce hídrico que alimenta el Lago de la República, que está dentro del Club Acaray, podría estar en peligro debido a que se depositaron allí desechos de construcciones y basura. Vecinos denunciaron un posible grave daño al medio ambiente. Los datos indican que la empresa Sommelferd llevó a tirar allí una gran cantidad de escombros; además, hay otros tipos de desechos. El hecho solamente se puede ver del aire mediante el uso de drones.
La denuncia se presentó en la comuna de Ciudad del Este, pero por orden del entonces intendente Miguel Prieto Vallejos, se escondió y se hizo desaparecer. Es contra el Club Acaray y la constructora Sommelferd.
Las fotos con drones muestran la gran cantidad de desechos de construcción o de movimiento de tierra que se llevó al lugar donde está un humedal y un cauce hídrico que alimenta el Lago de la República.
Los vecinos dijeron que se veían camiones de la empresa Sommelferd llevar los desechos de construcción a la zona de humedales. Cosa que se confirma con las imágenes obtenidas con drones.
Pero además de los desechos de construcciones o tierra, hay otros tipos de basura que se estaban depositando en forma irregular o ilegal en el lugar.
Los vecinos esperaban que la comuna, a través de la Dirección de Medio Ambiente, intervenga y se puede ver lo que hicieron en la zona del humedal, para después presentar una denuncia ante el Ministerio Público.
Recordaron que los directivos, que no se sabe quiénes son, ya habrían vendido una parte del humedal a una empresa surcoreana por 4 millones de dólares.
Quienes aparecen como responsables del mencionado Club Acaray son los hermanos Brizuela; el principal sería Tulio Brizuela, de acuerdo a las informaciones.
La constructora Sommerfeld ya fue denunciada por haber usado el predio del vivero municipal como depósito de la tierra que está sacando de un terreno donde construirán un centro comercial. Esto lo hace a orillas del arroyo Amambay, sin estudio de impacto ambiental. Parte de la tierra y las piedras caen en el lecho natural del mencionado cauce hídrico. Pero el intendente Miguel Prieto Vallejos, hoy separado del cargo por corrupción, le había agradecido a la constructora, argumentando que «revitaliza» el vivero, cuando en realidad es un crimen ambiental.