Vecinos de la zona del Área 3 y barrio Boquerón II, de Ciudad del Este, pedirán al interventor Ramón Ramírez la clausura definitiva de la discoteca clandestina Brooklyn o BKLYN, que opera con la fachada de restaurante. ¿Pero es realmente un centro gastronómico…? Los dueños son los impresentables Santiago Julián Ortiz Blasser y Paloma Méreles, hija de Lucas Méreles (Yrendague cambios), señalado como un megalavador de dinero sucio en la frontera Paraguay-Brasil. La pareja reside en el barrio cerrado del Paraná Country Club, de Hernandarias, sin ruido.
El boliche “BKLYN” de Paloma Méreles y su esposo Santiago Julián Ortiz Blasser estaba operando bajo la protección política del corrupto intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, quien fue separado del cargo.
Los vecinos esperan que los abusos y la generación de polución sonora en la discoteca clandestina Brooklyn sean parados. Está violando las leyes de la República y la propia Constitución Nacional.
Precisamente la polución sonora es el argumento para pedir la clausura definitiva de la discoteca Brooklyn o BKLYN, que opera con la fachada de restaurante. ¿Pero qué es realmente…?
Paloma Méreles, una de las propietarias, es hija de Lucas Méreles, señalado como megalavador de dinero en la frontera.
Pero ¿por qué la Policía Nacional, el Ministerio Público y la propia comuna esteña ignoran las denuncias contra este establecimiento? No hay duda de que el dinero todo lo puede, pero, ¿de dónde sale tanto dinero? Sin duda es una interrogante que tienen los vecinos, que está en el aire y que debe ser aclarada por los organismos estatales.
Para este sábado 2 de agosto nuevamente están anunciando una noche de terror para los pobladores del Área 3 y el barrio Boquerón II. La pareja de impresentables prepara una farra que se denomina “Friends” con el argentino Lázaro Boldrini.
Sus conciertos al aire libre los hacen en la parte trasera de su restaurante, que es solo de fachada, porque es una discoteca clandestina. Aunque, al parecer, supuestamente, todo sería de fachada. Es más, existiría una investigación en andamento por cheques por sumas siderales. Pero este es otro asunto.