En octubre de 2023, se registró lo que podría ser uno de los mayores robos de mercaderías en Ciudad del Este. Se llevaron celulares por unos 4 millones de dólares de la firma Showcell Corporation S.A., propiedad del libanes Akil Herz, quien ya fue detenido por piratería. Hasta el momento no se sabe si los mismos ingresaron legalmente al país. El concejal departamental, el colorado, Fernando Schuster, dijo que sorprende que no se haya realizado la trazabilidad de los productos robados para saber el origen de los mismos. El caso fue enfriado por la fiscalía.
AHORA CDE en varias ocasiones se pregunto si los celulares iPhone robados ingresaron en forma legal al país. La carga que se robaron supera los 4 millones de dólares, y presumimos de se trato de un feroz golpe de seguro.
Sugestivamente el Ministerio Público nunca aclaró si los celulares robados ingresaron de contrabando o pagando todos los tributos.
Correspondía a la Dirección Nacional Ingresos Tributarios (DNIT) a cargo de Oscar Orué, realizar la trazabilidad de los aparatos robados para saber si ingresaron en forma legal, pero nunca se hizo esto.
El concejal departamental, Fernando Schuster, quien lanzo fuertes criticas contra Orué, le reclamo esto. Dijo que correspondía que la DNIT haga esa trazabilidad para saber que es lo que se robó.
El propio Ministerio Público en la zona a cargo de Jorge Sosa García, puso paños frio al tema y las investigaciones no prosperaron, pero el caso tuvo repercusión internacional.
El Departamento de Investigaciones a cargo del cuestionado comisario Jorge Vidallet, ya rajado de la zona, hizo su parte para no aclarar el caso.
Ahora la terma vuelve al tapete luego de que el concejal departamental lo haya mencionado criticando a la DNIT y a su titular Orué.
Según el reporte, entre tres a cuatro hombres, a cara descubierta y con armas de fuego en mano, ingresaron al lugar y encañonaron al comerciante, a quien propinaron un culatazo a la altura de la cabeza.
Posteriormente, los ladrones se alzaron con varias cajas de teléfonos celulares de la marca iPhone (cantidad a determinar), llevándose a su vez el DVR del circuito cerrado para no dejar evidencias.
El valor de las mercaderías robadas del depósito oscila los 4 millones de dólares, según los cálculos preliminares.