La Superintendencia de Mantenimiento, dependiente de la Dirección Técnica de ITAIPU, avanza en un importante proyecto de modernización de pararrayos de 220 kilovoltios (kV) en la Subestación Margen Derecha (SEMD). La función principal de estos dispositivos es proteger el equipo eléctrico contra sobretensiones transitorias, causadas por descargas atmosféricas (rayos) o maniobras en la red eléctrica.
Los pararrayos desvían las corrientes de sobretensión a tierra, evitando que el voltaje excesivo dañe los transformadores y otros componentes del sistema eléctrico. Esto mejora la seguridad y prolonga la vida útil de los equipos. El fin de semana último culminó la modernización de los pararrayos del Autotransformador/Regulador T03/R03.
Desde hace varios meses, los técnicos de ITAIPU han venido reemplazando progresivamente los pararrayos con aisladores de porcelana, que han estado en servicio por aproximadamente 40 años, por nuevos pararrayos con aisladores poliméricos. Esta modernización permitirá el uso de una nueva generación de pararrayos con una vida útil esperada de 25 años o más, además de minimizar el riesgo de fallas o explosiones en caso de deterioro del aislador de porcelana.
Hasta la fecha, ya fueron reemplazadas 18 unidades, incluyendo los pararrayos de T02/R02, T03/R03, T07 y LI MD-ACY2-SEMD (línea de transmisión con la central Acaray), de un total de 33 unidades planificadas. El cambio de los equipos restantes está previsto para finales del año 2026, durante los trabajos de mantenimiento preventivo, según explicó el ingeniero Vicente Mendoza, de la Superintendencia de Mantenimiento de ITAIPU.
“Para la sustitución de estos pararrayos, es necesario realizar su comisionamiento previo, adaptar las bases y readecuar la parte activa de los conductores de interconexión. Esta actividad se está ejecutando en la usina aprovechando la desconexión de equipos durante las tareas de mantenimiento preventivo”, señaló el profesional.
Con esta modernización, ITAIPU reafirma su compromiso con la seguridad operativa y la confiabilidad del sistema eléctrico, a fin de asegurar el funcionamiento eficiente de la subestación y protegiendo los equipos críticos de la central hidroeléctrica.