La denominada «pareja imperial» del contrabando, Norma Espínola Roa y su esposo «Beto-í», usa a la Justicia para amedrentar a periodistas, buscando callar las denuncias del esquema de contrabando desde la Argentina. Cuenta con el apoyo del capitán de navío, Pablo Francisco Barros Pereira, comandante del Área Naval del Este. La citada mujer presentó un «habeas data» para saber quién es el responsable de las publicaciones, y sorprendentemente la jueza, Cinthia Pineda Morel, hizo correr el pedido cuando debió rechazarlos por improcedente.
Un “Habeas Data” no es para buscar identificar al periodista que está denunciando el esquema de ingreso ilegal de mercaderías desde la Argentina. El ejercicio del periodismo es libre. La libertad de prensa y expresión está garantizada por la Constitución Nacional. La propia carta magna establece que los periodistas no están obligados a revelar sus fuentes ni en juicio.
O sea, la acción judicial es aberrante, y tiene un claro objetivo. Tratan de meter miedo a los periodistas, para que estos se callen y dejen de denunciar como entran productos de contrabando desde la Argentina con protección de la Armada paraguaya.
No pudimos saber el contenido de la notificación que nunca llegó a AHORA CDE, pero nos enviaron parte del mismo por mensaje usando las redes sociales.
Para entender:
El hábeas data es una garantía constitucional que permite que todos los habitantes puedan acceder a las constancias de los archivos y por lo tanto puedan controlar su veracidad.
Pero el habeas data presentado por Norma Espínola Roa, junto a su esposo Beto-I, y el apoyo del capitán de navío, Barros Pereira, es para saber quién escribe las denuncias sobre el ingreso de contrabando desde la Argentina en la zona comprendida entre Tres Fronteras y Península, inclusive usando un puerto clandestino.
La jueza, Cinthia Pineda Morel, en lugar de rechazar por improcedente la acción, dio lugar. Pero si quieren saber sobre los administradores del perfil de AHORA CDE, eso deben preguntarlo a META, la empresa responsable de Facebook.
Desde donde se lo mire queda en claro que el objetivo es meter miedo, porque el proceso es una aberración jurídica.
Pero lo más grave es que se usa a la administración de justicia para callar las denuncias sobre el flagelo del contrabando que causa un grave daño a la economía nacional.
Y de yapa, un alto funcionario militar de la Armada Paraguaya, como el capitán de navío Barros Pereira, está detrás de todo esto.