El gobernador de Alto Paraná, César Landy Torres, adjudicó la compra de alimentos para el programa hambre cero a 7 cuestionadas empresas, varias de ellas ya involucradas en sonados casos. Igualmente, entre las «beneficiadas» está la firma FASV propiedad de la seccionalera cartista, María de Fátima Sartorio Vanni, quien tiene dos reportes de hechos penales de la Contraloría por haber causado daños patrimoniales en Ciudad del Este y Minga Guazú. Con esto el programa camina a ser un fracaso en el décimo departamento.
De las 8 empresas que se presentaron, 7 fueron adjudicadas. Una no fue, y esta presentó denuncia de manipulación en el proceso, que no sorprende.
De hecho, AHORA CDE ya denunció que el gobernador Landy amaña todo el proceso para que las cuestionadas empresas sean las adjudicadas.
VEAN EN EL CUADRO DE CONTRATACIONES QUIENES SON LAS ADJUDICADAS:
El gobernador puso a las hermanas Marilyn y Fanny Jiménez Peña, para poder asegurar la adjudicación de la compra de los alimentos para el programa hambre cero a las cuestionadas hermanas. La titular de la Unidad Operativa de Contrataciones (UOC) es Marilyn, y la misma poco y nada conoce del tema. Quien todo maneja es su hermana, Fanny, quien es secretaria de Hacienda.
Landy y sus cómplices, las hermanas Jiménez, adjudicaron la compra de alimentos por G. 9.250 millones a la seccionalera, María de Fátima Sartorio Vanni. Es dueña de la empresa FASV Import. Export., con un rosario de denuncias de negociados, y hasta de entregar porquería en lugar de comida a los escolares.
La Contraloría General de la República igualmente emitió dos reportes de hechos penales contra la seccionalera y su empresa por haber causado daños patrimoniales a las comunas de Minga Guazú y Ciudad del Este.
La otra empresa es FITRA S.R.L., cuyo dueño es Gustavo Trabucco. El monto es de G. 12.437 millones. Era una de las firmas preferidas para sus negociados del ex gobernador, Roberto González Vaesken, cuyos negociados fueron tapados y blanqueados por Landy Torres.
A los dos mencionados se unen otras dos firmas conocidas por ser parte de la rosca de negociados con la comida de los escolares.
Se trata de Copacabana, de Teófilo Salina Amarrilla, cuyo monto es de G. 11.257 millones.
Está además la panadería Maná, de Isabel Petrona Gómez Cabrera, por G. 13.687 millones de guaraníes.
El monto total de la adjudicación es de 87.680 millones de guaraníes.