La Policía Federal desarticuló un esquema que estaba llevando grandes cantidades de vapeadores al Brasil. Los productos eran enviados hasta el lejano estado de Tocantins y vendidos en forma “on line”. Los agentes federales indicaron que el movimiento era grande. Todos los cigarrillos electrónicos, de origen chino, eran adquiridos en Ciudad del Este. El gobierno brasileño prohibió la comercialización, tenencia, tránsito y hasta propaganda de dichos productos por ser altamente peligrosos para la salud pública.
Operativos que se realizan en el Brasil desnudan el gigantesco negocio de los vapeadores que son vendidos sin control sanitario, y que ingresan masivamente de contrabando pese a la reducción de los impuestos.
Son miles de cigarrillos electrónicos que todas las semanas ingresan al país para ser comercializados en Ciudad del Este. La mayor parte, ya sea de contrabando o directamente en frío, de acuerdo a los datos.
Es uno de los sectores del comercio esteño que más creció en los últimos años, de acuerdo a los datos. Sin duda es un negocio ilegal que mueve sumas siderales en dólares, indicaron fuentes del sector.
Sobre el procedimiento en el vecino país se informó que la Policía Federal ejecutó el miércoles 10 una orden de registro y confiscación en Foz de Yguazú durante la Operación “Vapor Digital”, una investigación creada para desarticular un grupo criminal especializado en el contrabando y la venta de cigarrillos electrónicos desde el Paraguay.
Las investigaciones comenzaron a principios de 2025, cuando los agentes identificaron que una pareja residente en Foz estaría abasteciendo a comerciantes de Tocantins, norte del territorio brasileño, con cigarrillos electrónicos ilegales, lo que llevó a la primera fase de la operación en ese estado.
A medida que avanzaban las investigaciones, la Policía Federal confirmó que la pareja también operaba en el comercio online y suministraba grandes cantidades de productos a comerciantes de la capital paulista.
El material incautado este miércoles debería reforzar el análisis sobre la estructura financiera y logística de la banda. La Policía Federal informó que las investigaciones continúan en curso para identificar a otros posibles miembros de la trama y trazar toda la red de distribución de los cigarrillos electrónicos de contrabando.











