Las cuestionadas diputadas coloradas cartistas, Liz Acosta y Bettina Aguilera, se aprovechan de la obra vial financiada por la Itaipú, para figuretear. Ambos se fueron para sacarse fotos con el vicepresidente en la reunión con el intendente de Alto Paraná, para delinear la construcción de 200 kilómetros de asfaltado. La narcodiputada Liz Acosta estuvo con su padrino político, el corrupto gobernador César Landy Torres, mientras Bettina Aguilera volvió a aparecer por la región para mostrarse, pero con trabajo ajeno. Y para esto la ciudadanía les paga sus jugosos sueldos.
Las cuestionadas diputadas se estuvieron codeando para sacarse fotos con el vicepresidente Pedro Alliana. Fue en la reunión con intendentes de Alto Paraná, donde claro no estuvo una vez más el corrupto intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, que no le interesa la obra donde él no va a facturar.
Tanto la narcotidputa como la legisladora más busca de Alto Paraná estuvieron allí a solo efecto de aparecer. No se sabe si Bettina quiere el rekutu; todo indica que sí, pero la narcodiputada Liz Acosta quiere ser intendente de Ciudad del Este y fue a la reunión con su padrino, el corrupto gobernador del décimo departamento, Landy Torres.
La reunión fue para los intendentes con el director de la Itaipú, Justo Zacarías, y el vicepresidente Alliana, y no para que cuestionadas diputadas con aspiraciones políticas aparezcan para hacer proselitismo. Es lamentable esto.
Ambas nunca son mencionadas por hacer algo en favor de los ciudadanos, como pedir que se aclaren las denuncias de corrupción en la Gobernación de Alto Paraná y en las comunas como las de Ciudad del Este, Presidente Franco, Minga Guazú, Hernandarias, Yguazú, Santa Rita, por mencionar algunas.