El cónsul paraguayo en Puerto Iguazú (Argentina). Magno Álvarez, está desatendiendo sus funciones diplomáticas en el país vecino para activar en política, violando las leyes del país. Alvarez, quien ya soporta denuncias por no pagar a sus ex empleados, está en casi todas las reuniones donde participa Wilberto Cabañas quien es precandidato a la intendencia de Ciudad del Este.
El funcionario consular al parecer no se puede quitar su condición de hurrero colorado y en forma permanente está en Ciudad del Este, cuando debería estar en la Argentina. El citado abandona sus funciones para hacer política en Ciudad del Este a favor de Wilberto Cabañas, de Colorado Añeteté.
El cónsul Magno Alvarez, viola el artículo 34, inciso k, de la Ley 1335/99 del Servicio Diplomático y Consular.
La normativa establece que los funcionarios del servicio diplomático y consular no podrán “ejercer actividad proselitista de carácter político-partidario en el desempeño de sus funciones”.
Percibe un salario de G. 16.786.392, según la planilla de salarios del Ministerio de Relaciones Exteriores.
Aparte, el cónsul recibe además aproximadamente G. 7 millones para el alquiler de su residencia. Y debería estar residiendo en el vecino país, cosa que no lo hace.
No es la primera vez que Álvarez viola la ley diplomática. Desde hace años lo viene realizando en forma sistemática.