El concierto al aire libre que está anunciando la discoteca «Brooklyn» (BKLYN) para este fin de semana se hará en lo que ellos llaman estacionamiento, que en realidad es el patio trasero de su local, enclavado en medio de dúplex donde viven familias honestas y trabajadoras. Los clientes del mencionado local nocturno usurpan los espacios públicos para estacionar. Los dueños de la discoteca son la impresentable pareja formada por Paloma Méreles y su esposo Santiago Julián Ortiz Blasser.
Brooklyn o BKLYN no tiene estacionamiento. Lo que tiene es su patio trasero. Los dueños de la disco mandan a sus clientes a estacionar en el paseo central de la avenida Campo Vía, en las veredas de las casas, o en cualquier lugar donde encuentren lugar. Cuando salen en la madrugada o la mañana, totalmente drogados y borrachos, causando todo tipo de líos.
Vomitan, orinan, y arrojan las botellas y vasos de bebidas en las casas ajenas.
Paola Méreles, hija del mega lavador de dinero sucio, Lucas Méreles, y su esposo Santiago Julián Ortiz Blasser, están organizando una vez más con el apoyo del cuestionado intendente, Miguel Prieto Vallejos, un concierto al aire libre.
Estarán infernizando una vez más a los ciudadanos trabajadores y honestos quienes no pueden descansar.
Con el concierto que están organizando por Paloma y su esposo, se viola la Ley 1.100 sobre polución sonora y la propia Constitución Nacional.
No hay duda de que el poder económico se impone ante el derecho de los ciudadanos, quienes son pisoteados.
Lo más grave es que el local nocturno está estrechamente vinculado a uno de los más grandes lavadores de dinero de la frontera. Se trata de Lucas Méreles, padre de Paloma Méreles, la jugadora de pádel.
Los vecinos de Brooklyn esperan que la comuna cumpla con su labor y suspenda las actividades de la mencionada casa nocturna que viola sistemáticamente las normas legales.