Por tierra, agua, y aire, y usando armamento pesado los organismos de seguridad y fiscalización del Brasil controlan la frontera brasileña-paraguaya. Indican que el objetivo es combatir las actividades ilegales, pero de paso espantan a los turistas y sacoleiros asfixiando al comercio de Ciudad del Este.
La situación comercial ya era critica, pero ahora está empeorando con “muralla” que el Brasil está poniendo en la frontera. Los controles son rigurosos. Nadie pasa sin ser fiscalizado. Los efectivos policiales y militares literalmente realizan una cazada en la frontera.
En la zona del Lago de Itaipú, donde realmente operan los grandes contrabandistas de cigarrillos y traficantes de marihuana, ya realizaron varias incursiones.
Pero los procedimientos igualmente se realizan en las zonas por donde se desplazan los turistas y sacoleiros. Estos están cancelando sus viajes debido a la “Operación Muralla”.
Los comerciantes indicaron que la situación ya estaba complicado debido al alto costo del dólar frente al real, y ahora con estos operativos las cosas empeoran.
La operación “Muralla” es mucho más rigurosa que las realizadas años anteriores. Están siendo movilizados más efectivos militares y policiales y cuentan con mayor infraestructura, de acuerdo a lo informado.
Mientras el gobierno paraguayo nada hace para buscar reactivar la actividad comercial que está en crisis hace más de 4 años. Tampoco toma medidas para formalizar el sector. Existen varias propuestas, que siguen siendo ignoradas por las autoridades.