El aumento de la fiscalización en el Puente de la Amistad y en la carretera BR-277, principal vía de acceso y salida de Foz de Yguazú, obligó a los contrabandistas y traficantes a encontrar rutas alternativas para ilícitas en la frontera. Esta situación fue revelada durante un seminario sobre seguridad en las fronteras, realizado en Foz do Iguaçu esta semana
El delegado ejecutivo de la Policía Federal, Mozart Fuchs, confirmó que las nuevas rutas son el río Paraná, desde la zona de las Tres Fronteras hasta la represa de Itaipú, y en el Lago de Itaipú, que va desde Foz hasta Guaíra (desde Hernandarias hasta Salto del Guairá en el lado paraguayo). Otros grupos migraron a la frontera seca de Pedro Juan Caballero, donde el Primer Comando Capital (PCC) actúa con total libertad.
Las operaciones «Muralla», «Frontera Integrada» y «Ágata», que cuentan con la participación y apoyo de prácticamente todas las fuerzas policiales, combate estas actividades ilegales en la frontera entre Paraguay y Brasil.
Para reprimir el contrabando y el tráfico en esas áreas que se encontraban prácticamente desguarnecidas, la Policía Federal cuenta con el Núcleo de Policía Marítima (NEPOM), cuya mayor base completó un año en noviembre de 2017. Esta base está ubicada en las cercanías del Puente de la Amistad y está equipada con lanchas blindadas, cámaras modernas que pueden registrar ilícitos en la oscuridad y armas de grueso calibre.
Sólo en mercancías y vehículos incautados en 2017, en el período de enero a septiembre, el valor alcanzó la marca de US $ 6.676.080,58, equivalente a casi 22 millones de reales, informaron en el Brasil.
Hay dos bases más del Nepom, una situada al borde de la represa, en la ciudad de Santa Elena, y otra en Guaira.