El Gobierno paraguayo recibió informaciones confidenciales sobre un esquema de financiamiento a terroristas donde estarían involucrados al menos 90 comerciantes de Ciudad del Este. El comandante del esquema sería el libanés, con nacionalidad paraguaya y brasileña, Hicham Abdul Aziz Moussa, dueño de Mario Cel. Esta firma comercial ya está siendo investigada por la DNIT por evasión y lavado de dinero.
Luego de la intervención de la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT) en la empresa Midi Star S.A. (Mario Cel) en el marco de la operación «Tujami» en Ciudad del Este, saltó una información confidencial sobre el dueño de la citada firma, Hicham Abdul Aziz Moussa y su hermano Ahmad Adbul Aziz Moussa, quienes estarían manejando un esquema de financiamiento a grupos extremistas islámicos desde las Tres Fronteras.
En base a los datos sensibles, se pudo saber que hay un intercambio de informaciones entre organismos de inteligencia y seguridad sobre las actividades de Hicham y su hermano Ahmad en la zona de las Tres Fronteras.
Ambos, a través de la firma comercial Midi Star S.A. (Mario Cel), están evadiendo sumas siderales en impuestos al vender mercaderías exentas de tributos a contribuyentes inexistentes. Entre ellos un humilde operador de maquinarias, quien estuvo buscando trabajo. El mismo supuestamente compró productos por unos 8,4 millones de dólares.
Las informaciones indican que al menos 90 comercios de Ciudad del Este, todos ya debidamente identificados y todos ellos con antecedentes por evasión y lavado de dinero en la frontera, serían parte del esquema de financiamiento de grupos terroristas, supuestamente.
Existen libanes quienes se dedican solamente a realizar transferencias en forma clandestina desde Ciudad del Este vía Foz de Yguazú, Brasil, para países del Medio Oriente y países asiáticos.
El Gobierno paraguayo informó que colectó una importante cantidad de informaciones sobre las actividades ilegales del Hicham y su hermano Ahmad Abdul Aziz Moussa.
Los auditores de la DNIT confirmaron que ambos hermanos realizaron ventas a contribuyentes inexistentes por más de 62.300 millones de guaraníes. Todo esto para evadir impuestos y tener dinero que sobre para enviar a grupos extremistas, supuestamente.
En la DENIT informaron que el proceso de investigación aún no terminó y ya tiene evidencias sobre las evasiones impositivas y el lavado de dinero.