Una alerta por una supuesta fuga en el Centro de Reinserción Social de Minga Guazú, este miércoles por la mañana, terminó siendo una falsa alarma generada por una actividad rutinaria de limpieza dentro del predio penitenciario.
La confusión se generó cuando aparentemente un recluso estaba intentando trepar la muralla del penal. Ante la gravedad del hecho, se activaron de inmediato los protocolos de seguridad.
Sin embargo, según aclaró el comisario Jorge Cardozo, la situación fue rápidamente controlada y verificada.
“No se trató de un intento de fuga. Agentes penitenciarios estaban realizando tareas de limpieza en el tanque de agua del penal, con la colaboración de internos. Desde lejos, alguien interpretó que se trataba de una persona intentando escalar el muro”, explicó Cardozo.
El tanque de agua, ubicado a unos 20 metros de la muralla, era objeto de mantenimiento. Un agente penitenciario, acompañado de un reo asistente, estaba realizando la tarea que generó la falsa alarma. Esta modalidad de trabajo forma parte de un régimen interno en el que ciertos internos colaboran en tareas logísticas bajo supervisión.
Tras el incidente, se realizó un conteo total de la población penal, confirmándose la presencia de los 820 reclusos que actualmente están alojados en el centro. Ninguna persona se había fugado.
