El Reveillón que está organizando el intendente de Ciudad del Este, Dani Pereira Mujica, va a costar unos 150 mil dólares, donde ya se incluye el show pirotécnico, los artistas y la transmisión del evento por un canal de televisión abierta. Sin duda es un tremendo despilfarro cuando en las calles de Ciudad del Este hay niños que no tienen un plato de comida. Sobre que es un atractivo, es una de las más burdas mentiras tratando de justificar lo injustificable.
El reveillón del Clan Prieto tiene como principal objetivo promocionar la imagen política de Pereira Mujica, quien en 2026 buscará el rekutu en el cargo; y la de Miguel Prieto Vallejos, exintendente, destituido por corrupto, quien tiene aspiraciones presidenciales.
En el reveillón pasado, Pereira Mujica aún era el asesor planillero de Prieto; y apareció en el evento vestido impecablemente de blanco junto a su esposa y sus dos hijos.
Esta imagen muestra lo bien que ya estaba la familia de Pereira Mujica, y ahora debe estar mucho mejor que es intendente.
REVEILLON O UN PLATO DE COMIDA

Pero esa imagen es el símbolo del despilfarro, una imagen que esconde la realidad de Ciudad del Este, que es la de una ciudad donde hay centenas de niños que duermen en las veredas y no tienen un plato de comida.
Mientras Pereira Mujica, sus dos hijos y su esposa van a estar brindando a lo grande y gastando unos 150 mil dólares, muchos chicos van a estar deambulando por las calles llenas de baches y sucias, sin tener nada que comer.
Cuando aún estaba Prieto como intendente, derrocharon más de 900 millones y fabricaron una transferencia a una ONG de Asunción.
DISCRIMINACIÓN Y MENTIRAS
Debido a los problemas, que no se vieron por TV, este año los VIP estarán en el anfiteatro del Lago de la República. Son para los privilegiados.
Mientras los comunes van a estar bien lejos, en la vereda que está sobre la calle Concejal Romero.
Las mesas destinadas a los comunes en un 100% fueron copadas por los operadores políticos de Yo Creo, Clan Prieto. Como se puede ver, hay doble discriminación hacia las familias esteñas. Claro, no es la familia de Pereira Mujica la que tendrá privilegios.
Pereira Mujica miente al tratar de justificar el despilfarro y decir que es un atractivo turístico. No hay lugar para turistas. No hay promoción. Y antes que hacer el reveillón, debería primero arreglar las calles y señalizarlas.











