El documento atribuido al exembajador estadounidense, Marc Ostfield, menciona el esquema de coimas que montaron Hugo Velázquez y Juan Carlos Duarte cuando estuvieron al mando del Ministerio Público en Ciudad del Este. Se menciona un caso de soborno por un millón de dólares. Pero no da detalles. Pero ese caso de coima es el relacionado al caso de Kassen Hijazi y su casa de cambios clandestinas “Telefax” que estaba en el edificio Brasil. El libanés, quien fue detenido, llevado a EE.UU. pero que ya está libre, había confirmado que pagó dicha suma para quedar libre de la justicia en Paraguay.
AHORA CDE ya lo publicó. El argumento que usó EE. UU. para declarar “significativamente corrupto” a Hugo Velázquez y Juan Carlos Duarte se relaciona con la coima que cobraron a Kassen Hijazi para “enterrar” su caso que se inició con la intervención a la casa de cambios clandestina de Hijazi, denominado “Telefax”.
El esquema de Hijazi fue investigado por periodistas, del cual se aprovechó Juan Carlos “Charly” Duarte para negociar. Además de “Charly” Duarte, estaba metido su jefe en la época, Hugo Velázquez.
En el allanamiento en la casa de cambios de Hijazi encontraron 600 mil dólares en efectivo. Con esto esquivo la cárcel. Pero después Hijazí tuvo que poner 400 mil dólares para que no quede con un proceso encima, y quedó “blanqueado”.
Sobre la nota del exembajador, fue el golpe bajo que sacudió la política paraguaya que sale a la luz.

Un informe diplomático secreto de agosto de 2022 destapa la infame injerencia del exembajador de EE. UU., Marc Ostfield, en las internas del Partido Colorado. En la nota dirigida hacia la Secretaría de Estado, se menciona el éxito de las sanciones aplicadas en ese momento a Horacio Cartes y además la solicitud del expresidente Mario Abdo Benítez para una reunión confidencial: “En línea con estas elecciones (internas), me sorprendió el llamado del presidente Abdo solicitando una reunión confidencial, la que se realizó ayer 2 de agosto en un lugar apropiado y sin posibilidad de que sea filtrada a la prensa”. El verdadero puñal por la espalda: la traición del expresidente Mario Abdo Benítez a su propio vicepresidente, Hugo Velázquez.
Volviendo al informe, en él Ostfield declara que Abdo le habría dicho en esa reunión que la elección de Velázquez como su vicepresidente había sido por mera “conveniencia política” y que en verdad este no contaba con su apoyo en las internas. Que la sociedad Benítez-Velázquez se generó con el solo objetivo de derrotar, en las internas del 2017, al candidato de Cartes, Santiago Peña.
Además, agrega que “quien realmente goza de su confianza (la de Mario Abdo) para sucederlo en la presidencia es el expastor protestante y actual ministro de Obras Públicas Arnoldo Wiens”. Esta descripción que hace Ostfield, oculta hasta este momento, pone el foco en la relación que la dupla presidencial mantenía de cara al enfrentamiento con Santiago Peña y las diferencias que sostenían respecto de cuál era el mejor camino para derrotar al candidato de Horacio Cartes.

En el escrito, Ostfield agrega que Mario Abdo le expresa una profunda incomodidad en su relación con el exvicepresidente Hugo Velázquez. Según Benítez, Velázquez, durante su etapa como fiscal de Ciudad del Este, habría facilitado el tráfico de influencias en varios casos judiciales a cambio de dinero y participado en procesos de lavado de activos para organizaciones criminales. En adición, durante su etapa como vicepresidente, habría participado en la adjudicación de licitaciones y obras públicas. Todo esto, dice el informe, corroborado y denunciado por los exfiscales René Fernández y Carlos Arregui.
Según Ostfield, la colaboración activa en todos estos hechos de corrupción habría sido provista por Juan Carlos Duarte, colaborador de la fiscalía de Ciudad del Este y en ese momento jefe jurídico de la Entidad Binacional Yacyretá.
En el final del encuentro —y siempre siguiendo el relato del informe de Ostfield—, Benítez solicita formalmente al gobierno americano la declaración de “significativamente corruptos” a Velázquez y Duarte, con el objetivo de que el primero decline su candidatura para que asuma Arnoldo Wiens. Este pedido no solo contempla una intromisión directa en los asuntos internos por parte del embajador, sino que también refleja la desesperación de Abdo en la pulseada interna contra Santiago Peña y Horacio Cartes.
Como conclusión del informe reservado remitido a la Secretaría de Estado, el exembajador Ostfield señala que, luego de “corroborar la información proporcionada y en línea con los reportes remitidos con anterioridad, considero seremos protagonistas de una jugada maestra destinada a eliminar políticos corruptos”. Y añade: “De llegar Wiens a la presidencia, tendremos un aliado incondicional con nuestro gobierno”.












