La ya cuestionada imagen de la Policía Nacional vuelve a verse empañada tras un grave episodio que involucra a la sede regional del Departamento de Investigación de Delitos de la Policía Nacional en Ciudad del Este. El hecho salió a la luz luego de que el sistema GPS de una camioneta robada en Brasil señalara como última ubicación justamente el predio de esta dependencia policial.
El vehículo en cuestión, un Jeep Compass Long negro, fue hurtado días atrás en la localidad de Paraguaçú, una zona rural del estado de São Paulo. Representantes de la empresa propietaria del rodado, Localiza Rent a Car, al detectar la ubicación del GPS, dieron aviso a agentes de la Comisaría 7.ª, quienes se dirigieron al lugar.
La sorpresa fue grande cuando, al llegar, los uniformados presenciaron cómo un hombre de contextura media y cabello corto abordaba la camioneta robada y huía a toda velocidad. Al intentar perseguirlo, los agentes fueron insólitamente interceptados por una patrullera del propio Departamento de Investigación de Delitos, que les cerró el paso y frustró la persecución.
El incidente genera un fuerte repudio público, al tiempo que se multiplican las sospechas sobre complicidades internas. Desde la empresa afectada, el abogado Jonathan Gómez presentó la denuncia formal ante la Subcomisaría 3.ª del barrio Santa Ana, dejando constancia de los hechos y cuestionando abiertamente la actuación policial.
Hasta el momento, ninguna autoridad del Departamento de Investigación de Delitos brindó una versión oficial ni asumió responsabilidades, a pesar de la gravedad de lo ocurrido.
Cabe destacar que esta dependencia es blanco de múltiples cuestionamientos en los últimos meses, especialmente desde que el comisario José Delegado asumió como jefe. Su gestión, lejos de marcar avances contra el crimen organizado, ha sido señalada por su inacción y por estar rodeada de polémicas.