Crece el volumen de mercaderías que viene de países asiáticos. La mayor parte entra de contrabando o evadiendo impuestos mediante el cambio de la partida arancelaria. Parte de esta carga pasa por Miami (EE.UU.). Otra parte llega por Colombia y Argentina. Llegan igualmente en contenedores, a través de Uruguay. Son electrónicos, vestimentas, y baratijas. El esquema cada vez más se consolida, de acuerdo a los datos.
China, dejo de ser el epicentro para la compra de las mercaderías que son adquiridas por los comerciantes e importadores de Ciudad del Este. Otros países asiáticos como ser Singapur, Malasia, Vietnam, y hasta India, son los nuevos centros desde donde vienen las mercaderías que son comercializados en el comercio de Ciudad del Este.
Las operaciones para las compras se realizan a través de China y Dubai en los Emiratos Árabes, de acuerdo a los datos.
Miami (EE.UU.), dejo de ser el epicentro para la compra de electrónicos como ser celulares, Tablet, computadoras, entre otros. Todo ahora se compra en los países asiáticos. Por ejemplo, los celulares, Tablet, y otros productos de la marca Sansumg, vienen de Singapur.
Estas cargas pasan por Miami (EE.UU.), porque no son piratas, pero tienen un costo mucho menor a los producidos en Corea del Sur, y que son comercializados en la mencionada ciudada estadounidense.
Mediante un convenio entre la Aduana de Paraguay y la aduana de EE.UU., se puede verificar si el monto de las mercaderías comprada en Miami, es la misma que se declara. O sea, si un comerciante o importador de CDE, compra productos por 100 mil dólares en Miami, debe declarar el mismo monto.
Cuando la carga viene de los países asiáticos la misma esta en tránsito y pasa sin problema para llegar a Paraguay donde ingresa ya sea de contrabando o con la partida arancelaria cambia con la cual se evade impuestos.
Actualmente los comerciantes e importadores libanes, quienes manejan el negocio, ya no usan sus nombres para evitar problemas con la justicia. Usan a paraguayos, que son sus empleados o a sus despachantes quienes abren firmas de maletín para concretar el negocio.
Así hay una descomunal evasión, y hasta contrabando desde países asiáticos.
Las cargas ingresan por diversos puertos y los aeropuertos de Luque y de Minga Guazú, indicaron nuestra fuentes y siempre hay la complicidad de los funcionarios aduaneros.
