El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, y 6 de sus concejales rastreros fueron denunciados por nepotismo y tráfico de influencia. La presentación se hizo en el Ministerio Público y se espera que no sea cajoneado una vez más. La Contraloría Ciudadana hizo público cómo Prieto metió a sus primos y primas como funcionarios municipales y con jugosos salarios. Ahora presentaron una denuncia por el caso de los nepoprimos.
La Contraloría Ciudadana de Ciudad del Este presentó, en la mañana del lunes 19, una denuncia penal ante el Ministerio Público contra seis concejales municipales serviles a Miguel Prieto. Es por presuntos hechos de nepotismo y tráfico de influencias, considerando que varios de los funcionarios municipales son parientes de los ediles.
Los concejales habrían utilizado sus cargos para ubicar a familiares en la Junta Municipal, violando leyes que rigen la función pública.
LOS CONCEJALES DENUNCIADOS SON:
María Ester Portillo Verón (PLRA).
Valeria Romero.
Pedro Acuña.
Sebastián Martínez.
Alison Anisimoff.
Víctor Torales.
Todos los mencionados con parientes cobrando salario en la municipalidad de Ciudad del Este.
El caso más representativo señalado es el de la concejal María Ester Portillo, quien habría favorecido a su hermana Marina Portillo Verón, contratándola como auxiliar en la Junta Municipal con un salario de G. 5.000.000 mensuales. La denuncia incluye capturas del portal de Datos Abiertos como evidencia documental.
La citada Marina después fue enviada como administradora del Cementerio Municipal, y para no estar sola le contrataron a su esposo, Cesar Caballero, como funcionario municipal.
Pero el más destacado es el asesor planillero de Prieto, el exdiputado Carlos Portillo, hermano de la concejal María Portillo.
Los otros denunciados son Valeria Romero, quien es la actual pareja de Prieto, nuevamente; Pedro Acuña, quien es cuñado de Prieto, y tiene a 5 de sus 9 hermanos como funcionarios municipales.
Sebastián Martínez, quien ya tiene dos imputaciones por robo en pandemia, tiene a sus familiares cobrando jugosos salarios, entre ellos su pareja.
Sin duda, el caso de Alison Anisimoff es grosero. Su papá, Alejandro Anisimoff, es planillero VIP. Cobra un jugoso salario, pero nunca trabaja. Primero figuraba como asesor de Prieto; ahora es asesor de su hija, la concejal.
Alejandro fue concejal, se ordenó su detención y este se fugó a Brasil por la usina de Itaipú. Todo por asociación criminal en esa época y exacción, o sea, metieron la mano en el bolsillo de los contribuyentes para robarles.
Y el concejal rastrero, Víctor “viático” Torales, quien es conocido por presionar a funcionarios y cobrar millonarios viáticos para irse a cursos “fantasmas”.
La presentación se sustenta en la Ley 2523/2004, la Ley 7302/2024, que modifica la Ley 5295/2014 sobre nepotismo, y artículos del Código Penal que tipifican el uso indebido del cargo público.