El intendente de Ciudad del Este, Miguel Prieto Vallejos, prepara, o ya adjudicó, otra obra a su vecino y operador político, Elvio Mareco Barrientos (MB Constructora). Es la obra de la rotonda reloj. Este personaje está siendo investigado por el Ministerio Público por negociados con dinero municipal por 16 mil millones de guaraníes; Elvio creó dos empresas para facturar a la comuna. Es claro que Prieto sigue con los esquemas de negociados, con los mismos autores. Debido a esto el mismo no puede seguir en el cargo.
Prieto ya adjudicó a las dos empresas creadas por su vecino y operador político, Elvio Mareco Barrientos, obras por 16 mil millones de guaraníes, todos en procesos amañados y que son groseros negociados. Esto mediante procesos establecidos por la Ley de Contrataciones Públicas.
Existen varias otras obras que se le adjudicaron por el esquema de desembolsos a comisiones, que en realidad es una simulación de desembolso, porque es la propia comuna que administra el dinero. Esto de hacer burlar los controles ciudadanos a través de Contrataciones Públicas.
La obra en la denominada rotonda reloj será, si ya no fue adjudicada, a Elvio Mareco. El citado personaje, quien está siendo investigado por los negociados, se presentó al proceso junto a Juan Ramón Doldan Domínguez.
Dos situaciones que se pueden observar en el acta de apertura de sobre con las ofertas evidencian que el proceso está manipulado a favor del vecino y operador político de Prieto.
El acta solo esta firmado por los funcionarios municipales. No por los oferentes, lo que es muy sugestivo y genera todo tipo de sospecha.
Otro punto es que la oferta que presentó el operador político del intendente es exactamente igual al monto establecido para la obra por la comuna.
No hace falta ser un experto o un perito para ver que esto está manipulado.
Debido a esto Prieto no puede seguir en el cargo. Tiene dos imputaciones y la audiencia de imposición de medidas no se puede realizar porque Prieto chicanea para evitar la justicia. Se pidió prisión domiciliar.
Prieto, siguiendo en el cargo, sigue con los negociados con el dinero del impuesto de los contribuyentes.