El Brasil solo acepta mantener la tarifa de Itaipu en 16,71 dólares, y no aumentarla como exige Paraguay. Esto es lo que afirmó el ministro de Minas y Energía del país vecino, Alexandre Silvera. Sostuvo que son inflexible, y anuncio que el acuerdo final sale en tres semanas. Pero dijo que para mantener la tarifa de la energía producida por la Binacional exigen concesiones de Paraguay. Como definir este año el nuevo Anexo C, y un preacuerdo con reducción de la tarifa en los años siguientes, que podría ser gradual.
El ministro de Minas y Energía del Brasil, Alexandre Silveira, afirmo que el acuerdo sobre la tarifa de Itaipú debe alcanzarse en tres semanas y que el precio fijado por Agencia Nacional de Energía Electrica (Aneel) no debe variar.
Silveira, afirmó que hay un punto de acuerdo en el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, para mantener la tarifa actual de la usina de Itaipú. La idea inicial era buscar una reducción del precio, pero la presión de Paraguay por un aumento hizo que se retrocediera. Sin embargo, para hacer esta concesión, la parte brasileña quiere contrapartidas de los paraguayos.
«No vamos a aumentar la tarifa de US$ 16,71 y somos inflexibles en eso. Pero si hay alguna concesión de Brasil, tiene que haber una contrapartida de ellos [los paraguayos]. Hay otras cuestiones que sirven a los intereses de Brasil a corto y mediano plazo», dijo Silveira en una conversación con periodistas en su oficina el miércoles pasado.
Entre las posibles contrapartidas, Silveira mencionó la posibilidad de fijar un plazo para negociar cambios estructurales en el contrato con la revisión del llamado Anexo C del Tratado de Itaipú. Brasil tiene prisa por mantener esta discusión. El presidente paraguayo, Santiago Peña, por su parte, intenta posponerla.
Para acordar el mantenimiento del valor actual de la tarifa Brasil también quiere pre-acordar con Paraguay una futura reducción de las tarifas, aunque sea gradual, teniendo en cuenta el fin de los pagos de la deuda para la construcción de la usina y la amortización de las inversiones.
Según Silveira, otra idea favorecida por Brasil es que las negociaciones de revisión tarifaria entre los gobiernos no sean anuales, como viene ocurriendo. Dijo que es natural que Paraguay intente siempre elevar los valores, ya que para el país vecino, por Paraguay, la usina es una de sus mayores fuentes de recursos para inversiones.
Según el ministro brasileño, se espera que el acuerdo se firme dentro de tres semanas. La última reunión entre las partes tuvo lugar el 17 de abril en Asunción. Silveira afirmó que se habían realizado progresos. La próxima reunión está prevista para la semana que viene, también en Paraguay. Es en esta reunión donde deben presentarse las contrapartidas.
Actualmente, está en vigor provisionalmente la misma tarifa de 2023, aprobada por la Aneel (Agencia Nacional de Energía Eléctrica) del Brasil. Esto de acuerdo a la versión de los brasileños.
La situación actual es la siguiente: la tarifa actual es de 16,71 US$/kW (seguirá en vigor hasta que se firme un nuevo acuerdo); Brasil propuso inicialmente reducir la tarifa a 14,77 US$, pero ahora quiere mantener los 16,71 US$ actuales. Paraguay – pide un aumento a 20,75 dólares (un 24% más).
La cuestión está en discusión entre los 2 países desde finales de 2023. La tarifa, denominada Cuse (Costo Unitario del Servicio Eléctrico), se fija cada año. Se cobra en dólares, en un cálculo que tiene en cuenta, entre otras cosas, los gastos de funcionamiento de la central y, hasta el año pasado, las cuotas de las deudas contraídas para la construcción de la presa.
Históricamente, la tarifa se fijaba de forma regulatoria, de acuerdo con el contrato. Sin embargo, desde 2022, se negocia entre ambos países. Desde que asumió el cargo, Santiago Peña se ha encargado de lograr un aumento en las tarifas cobradas. Incluso fue una de sus promesas de campaña, dicen los medios de prensa en el Brasil.