La cúpula policial en la zona Este del país, encabezado por el comisario general, Jorge Fernández Arévalo, director de la Policía Nacional en Alto Paraná, factura millones con el servicio de guardia privada que hacen los uniformados. Muchos de estos efectivos son del grupo de elite o GEO. Los mismos fueron entrenados para actuar en condiciones extremas, pero terminan en calles haciendo guardias, cuando deberían estar velando por la seguridad de la ciudadanía.
En diversos lugares de Ciudad del Este se puede ver a los integrantes del GEO haciendo guardia privada. Algunos de ellos indicaron que están cansados de ser explotados por sus jefes de turno. Todo esto ocurre ante la desidia de la comandancia y del Ministerio del Interior.
Solamente quien tiene recursos económicos puede tener una seguridad. Sin plata los comunes deben arreglarse ante la ola delictiva que azota la región este del país.
El director de Policía de la zona, el comisario Fernández Arevalo, es el que más lucra con este negocio millonario, de acuerdo a los datos obtenidos en la propia sede de la institución uniformada.
No hace falta ningún esfuerzo para detectar que gran parte de la dotación de la Policía Nacional en Ciudad del Este está destinada para el servicio de guardia privada. O sea son destinados para cuidar determinados negocios, acompañar transporte de dinero, mercaderías, y cuidar de personas.
Los jefes policiales de turno llegan a recibir hasta 6 millones de guaraníes mensuales por cada agente que sacan del servicio público y lo ponen al servicio de quien tiene dinero para pagar por la seguridad, que ellos deberían estar brindando a toda la población sin distinción.