Dos jóvenes paraguayos fueron expulsado el domingo 26 y lunes 27 de mayo de la Argentina. Ambos fueron detenidos por efectivos de la Policía Federal de dicho país en la terminal de ómnibus de Puerto Iguazú, y no declararon su ingreso a dicho país. El cónsul paraguayo en dicha ciudad, Magno Alvarez, casi nunca esta para atender estos casos. El citado funcionar diplomático esta por Paraguay haciendo política.
El domingo 26 de mayo una paraguaya identificada como Zunilda Marisa A.A. de 24 años fue expulsada por los argentinos. El lunes 27 de mayo otro paraguayo de 24 años identificado como Roberto G.R. fue detenido y expulsado. No tenían las documentaciones. O sea, ingresaron a la Argentina sin declarar su ingreso en Migraciones. Todo indica que entraron a suelo argentino en forma clandestina por el río Paraná.
Ambos fueron detenidos por los agentes federales argentinos. Fueron llevados a Migraciones del Puente de la Fraternidad, y expulsados hacia el Brasil.
Este tipo de procedimiento es casi habitual. Lo que llama la atención es que pese a que es reiterativo el consulado paraguayo en la mencionada ciudad argentina en las Tres Fronteras, nada hace.
Los connacionales cuestionan la completa inoperancia de Magno Alvarez, el cónsul de nuestro país que está más tiempo en suelo paraguayo que en el país vecino cuidando de los problemas de los paraguayos.