Informes de inteligencia y de la policía del Estado de Paraná, indican que se desato una guerra por el control del Primer Comando Capital (PCC) en la frontera entre Paraguay y Brasil. Indican que se vienen sucediendo asesinatos por este motivo, inclusive está metido los integrantes del grupo de Jarvis Pavao, de acuerdo a las publicaciones de UOL del Brasil.
Los delincuentes más buscados hoy por las autoridades del Estado de Paraná, Brasil, frontera con el Paraguay, están acusados de haber participado en el asesinato del hermano de uno de los líderes del PCC en Paraguay, iniciando una guerra por el control del crimen organizado en la frontera entre ambos países.
En fuga, también son sospechosos del asesinato de un policía militar fallecido tras un enfrentamiento el pasado domingo (17) en el interior del Estado de Paraná.
El asesinato ocurrió apenas dos meses después de que miembros de la pandilla escaparan de la prisión de Piraquara, en la región metropolitana de Curitiba. Los delincuentes se encontraban entre los 28 reclusos que huyeron tras la explosión del muro de la prisión y se dirigieron a Paraguay.
Fuentes vinculadas a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado Paraná y a la policía paraguaya señalan que miembros del grupo son sospechosos de haber asesinado a Lucas Ximenes en marzo de 2017 en Pedro Juan Caballero, en la frontera con Brasil. Su cuerpo nunca fue localizado.
El PCC en Paraguay, hasta entonces aliado del grupo que actúa en el Estado de Paraná identificado en su momento como «La Firma», rompió con los delincuentes tras la muerte de Lucas, hermano de Thiago Ximenes, de Matrix. Designado como uno de los líderes de la facción criminal de São Paulo en la frontera, Matrix fue arrestado en diciembre de 2018, recapturado y trasladado a Brasil al año siguiente.
Cinco presuntos integrantes de este mismo grupo huían en un automóvil y se enfrentaron después de que la policía se acercara a la carretera PR-323, en Cianorte (PR), el pasado domingo (17).
Baleado tras una persecución seguida de disparos, el cabo Reinaldo Garozi fue trasladado a un hospital, pero falleció a causa de sus heridas.
Fuerzas de seguridad del Estado de Paraná buscan localizarlos. Los sospechosos en el vehículo aún no han sido identificados formalmente por las autoridades.
Designados líderes del grupo, Mayco de Souza Moretti, Carlos Henrique Cândido Tavares y Rafael Bruno Rodrigues están libres y buscados por la policía del Estado de Paraná.
Las investigaciones señalan a la banda que actúa en el Estado de Paraná como responsable de otras tres muertes en la misma acción. Américo Ramírez Chaves fue descuartizado y encontrado en bolsas de basura en Ponta Porã, ciudad brasileña en la frontera con Paraguay.
El grupo también está acusado de haber asesinado a las hermanas paraguayas Adriana y Fabiana Aguayo Báez en junio de 2017. Un informe del Departamento de Inteligencia de las autoridades del Estado de Paraná obtenido por UOL indica que fueron asesinadas, decapitadas y sus cuerpos carbonizados en un vehículo encontrado en a ocho kilómetros del casco urbano de Pedro Juan Caballero.
La paraguaya Fabiana Aguayo Báez se convirtió en objetivo del grupo criminal paranaense luego de presuntamente contratar a sicarios para asesinar a Ronny Pavão por una deuda vinculada al narcotráfico.
El problema es que Ronny era hermano de Jarvis Pavão. La organización del narcotráfico había acogido al grupo que actúa en el Estado de Paraná en ese momento para un riguroso entrenamiento militar en la finca Pavão, en Paraguay.
Jarvis Pavão tiene activos por valor de más de 700 millones de reales, según una investigación conjunta entre la Policía Federal y la Secretaría Nacional Antidrogas de Paraguay en julio de este año.
Designado como uno de los principales narcotraficantes vinculados al tráfico de cocaína de Brasil a otros países, Pavão fue detenido en 2009 en Paraguay y ahora cumple su condena en la prisión federal de Brasilia.
