Los directores paraguayos siguen sin presentar un solo argumento sobre por el motivo por el cual la tarifa de la Itaipú no debe bajar. Los brasileños dicen que debe bajar y argumentan que la deuda y sus interese ya se pagaran todos y con esto el costo de la energía, por año, bajara unos 2.000 millones de dólares. En el Anexo C está muy claro cómo se calcula el costo de la producción de a usina Binacional. Lo de estudios técnicos es solamente para ganar tiempo.
Es cierto que en Itaipú todo debe ser por consenso. Que ni los brasileños, ni los paraguayos puede decidir en forma unilateral.
Pero los directores paraguayos no presentan ningún argumento para que la energía no baje. Solo dicen que se esta estudiante y que debe haber un acuerdo entre ambas partes.
Desde año los brasileños vienen diciendo que una vez que se pague toda la deuda y sus intereses el costo de la electricidad de la Binacional debería bajarse cerca de los 10 dólares.
En marzo de 2023, la Itaipú estará sin deuda y atendiendo a lo que dice el Anexo C, el costo de la producción debe bajar.
Los directores paraguayos encabezados Manuel María Cáceres, dicen que todavía se está estudiante a nivel técnico y que no hay acuerdo.
Pero está más claro que se debe aplicar lo que dice el Anexo C.
Los directores paraguayos lo único que están haciendo es ganar tiempo. De hecho, la tarifa va a bajar y esto ya esta establecido.
Sobre el tema la Binacional dio a conocer este informativo:
En el marco de un nuevo ciclo de diálogo con la Prensa, que se reanudó este viernes 23 de diciembre, el director general paraguayo de Itaipu, Manuel María Cáceres, reiteró que no existe un valor establecido para la tarifa de potencia del próximo año y que el análisis prosigue en la instancia técnica.
“Quiero dejar bien en claro que Itaipu no tiene tarifa para el año 2023, quiero ser enfático en esto porque hay gente que está interpretando hechos consumados que no existen”, acotó.
Precisó que el estudio de la tarifa no está en las instancias del Directorio Ejecutivo ni del Consejo de Administración actualmente, sigue en la fase técnica. “La tarifa se establece dentro de los ámbitos de la Itaipu a través del consenso, nunca fue una decisión unilateral; no es una imposición, es una decisión negociada, consensuada, y en ello estamos abocados en este momento”, añadió el director Cáceres.
Igualmente, mencionó que cada país tiene sus pretensiones en este proceso de negociación; Brasil quiere reducir el precio del costo unitario del servicio de electricidad y Paraguay quiere mantener el valor actual. Recordó que se debe tener en cuenta lo que establece el Anexo C del Tratado, pero siempre precautelando los beneficios para ambos países.
Asimismo, indicó que Itaipu tiene compromisos que asume para el desarrollo de la nación a través de las inversiones socioambientales, por lo que es importante establecer las Bases Presupuestarias teniendo en cuenta este aspecto. A la vez, reiteró que la discusión sigue su curso y que hay una administración brasileña que está de salida, pues finaliza su mandato el 31 de diciembre, por lo que la negociación deberá continuar con la administración entrante.
Por otro lado, el director general aclaró que la Itaipu Binacional va a seguir operando; tanto la ANDE como la ENBPar deben abonar por el servicio de electricidad y cuando se cierre la tarifa para el ejercicio 2023 se deberán compensar los números, como sucedió este año. En ese sentido, señaló que la Entidad cuenta con un flujo de caja disponible según los pagos que se vienen haciendo, por lo que seguirá trabajando con total normalidad.
Finalmente, enfatizó que las autoridades de la margen paraguaya resguardarán los intereses del país en este proceso de negociación binacional y reiteró que no hay acuerdos secretos o entreguismo como se pretende instalar.